A estas alturas, quien siga opinando que comer vegetales es aburrido, sin duda, necesita un bowl de este tipo para cambiar el chip. Me juego lo que quieras que cambiaría de opinión con la primera cucharada. Creo que este será el primer curri bowl de muchos. Es un plato que admite infinidad de opciones y que con solo cambiar dos o tres ingredientes ya puede generar experiencias sensoriales completamente distintas.

Me sigue sorprendiendo mucho cuando alguien me cuenta el trabajo que le cuesta comer verduras. En la mayoría de los casos, no es que no les guste, simplemente no han descubierto como cocinarlas para que les parezca placentero comerlas.
Cada vez que le digo a alguien que mi alimentación se basa un 75-80% en frutas y verduras, me miran con cara de desconfianza y me sueltan que ellos no podrían vivir a base de lechuga, que la vida es muy corta y que cómo no me aburro comiendo así. Si ellos supieran que precisamente por lo corta que es la vida, yo he decidido vivirla comiendo de la manera que más feliz me hace...

Ésta es una manera fantástica de ingerir verduras en cantidad y de todo tipo, además es un plato súper saciante por el aporte de grasas y fibra. El sabor es una delicia y con un montón de matices que puedes ir variando en función de las especias que añadas. Vamos, todo ventajas. Si te apetece comerte un plato bien nutritivo con un toque diferente, anímate a probar esta receta y me cuentas ;)
INGREDIENTES:
- ½ coliflor grande
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla morada
- 1 pimiento rojo
- 1 berenjena
- 1 puñado de espinacas frescas
- 2 patatas prebióticas (hervida y enfriada)
- 200 ml de leche de coco
- 30-40 ml de aceite de coco
- 30-40 ml de aceite de oliva virgen extra
- Curri
- Cúrcuma
- Pimentón dulce
- Pimienta negra
- Comino molido
- Perejil fresco
- Sal marina
PROCEDIMIENTO:
- Poner una sartén a calentar con un fondo de aceite de oliva y agregar la cebolla morada cortada en juliana. Remover hasta que esté tierna y con un tono dorado.
- Una vez dorada la cebolla, agregar el pimiento rojo cortado en cuadrados no muy grandes y el puñado de espinacas. Sofreír durante unos 4-5 minutos.
- Añadir al sofrito las berenjenas y las patatas hervidas, sin piel y cortadas en cubos.
- Se añaden el aceite de coco, el perejil, la sal y las especias (curri, cúrcuma, pimentón dulce, pimienta negra, clavo y comino) al gusto, en función de la intensidad de sabores que quieras conseguir. Remover para unificar bien el sabor de todos los ingredientes.
- Una vez la verdura esté cocida, añadir la leche de coco y subir el fuego durante un par de minutos (me gusta hacer esto para que la leche “se tueste”, de este modo se intensifica su sabor), luego volver a bajarlo y añadir algo de agua para crear la salsa.
- Dejar cocinar todo junto durante 15-20 minutos a fuego medio-bajo hasta que la salsa tenga una consistencia espesa.
- Retirar del fuego y dejar reposar 10 minutos antes de servir.
- Para el arroz de coliflor simplemente corta la coliflor en floretas y pásalas por un procesador de alimentos hasta obtener unos gránulos parecidos al arroz. Pon en una sartén una cucharada de aceite de coco y un par de dientes de ajos a sofreír, luego agrega el arroz de coliflor y cocínalo durante unos 2-3 minutos.
- Servir y disfrutar esta delicia llena de nutrientes, ¡buen provecho!