No es un secreto que soy fan fanática de cualquier tipo de col: blanca, morada, de Bruselas… Cocinados de cualquier forma y a cualquier hora. Las como casi a diario y no me aburro de ellas.
La col es una maravillosa forma de tomar ácido fólico (vitamina B9), micronutriente necesario para una gran cantidad de funciones en el organismo: regeneración cutánea y celular en general, protección cardiovascular e incluso prevención de cáncer, anemia o estados depresivos.
Si estás embarazadas es una vitamina especialmente importante para ayudar a prevenir los defectos de la médula espinal o el cerebro del bebé.
Mi otro gran punto débil son las espinacas, vegetal altísimo en hierro y calcio, pero con alto contenido en oxalatos. Los oxalatos son sustancias presentes de manera natural en algunos alimentos que impiden la correcta absorción de minerales y pueden llegar a general piedras en el riñón a aquellas personas que por genética son propensas a ello.
Por supuesto no se trata de no comer espinacas. Lo importante es saber como cocinarlas en función de la cantidad que vayamos a consumir. Para un plato completo de espinacas, será mejor hervirlas y dejar la mayor parte de oxalatos en el caldo de hervido.
Como siempre digo, nada de volverse loca. Lo bueno de las espinacas crudas es que mantienen todas sus vitaminas y minerales intactos, así que no pasa nada por comer un manojo crudo en ensalada cuando te apetezca. Peligroso es un Donut, no un puñado de verde.
Y sin enrollarme más, te dejo una receta que está bien cargada de micronutrientes de los buenos. Es un buen chute de vitaminas A, C, E, K, B6, B9 y minerales como hierro y calcio. Además el ajo es el antibiótico natural por excelencia. Una joyita para tu salud y una joyita para tu paladar (incluso si no te gustan las verduras 😉 ).
Receta que tendrás lista en 10 minutos y que queda genial incluso como relleno vegano de unos crêpes o tacos. Aguanta unos días en la nevera y es muy fácil de transportar si tienes que comer fuera de casa. Espero que la disfrutes y me cuentes si la pruebas.
INGREDIENTES:
– ¼ de col morada cortada muy fina
– 2 zanahorias ralladas
– ¼ de cebolla morada
– 100 gr de espinacas
– 3 dientes de ajo
– 30 gr (dos cucharadas) de aceite de oliva virgen extra
– Sal marina
Para el mojo picón
– 2-3 dientes de ajo (o al gusto)
– 1 guindilla
– 1 cucharada de vinagre
– 1 cucharadita de sal marina
– 1 cucharadita de comino en grano
– 1 cucharadita de pimentón dulce
– 150 ml de aceite de oliva virgen
PROCEDIMIENTO:
- En primer lugar vamos a cortar la zanahoria, la cebolla y la col lo más fina posible. Aliñar con un poco de sal y una cucharada de aceite de oliva. Apartar.
- Por otro lado hervir las espinacas y escurrirlas bien.
- En una sartén rehogar el ajo y cuando esté bien dorado apartaremos 4-5 láminas para decorar. Luego agregar las espinacas hervidas y dejar cocinar unos 5-7 minutos a fuego medio alto.
- Para el mojo picón batiremos todos los ingredientes hasta conseguir una mezcla homogénea.
- Para servir colocaremos una base de la ensalada de col, una porción de las espinacas rehogadas, las láminas de ajo que apartamos y una cucharadita o dos de la salsa.
- ¡A disfrutar!
2 comentarios
Esta manera de cocinar me recuerda muchisimo a mi madre! Que pinta tiene todo y cuanta razon tienes en que lo peligroso es un donut, no unas espinacas.
Gracias por comentar Inma!