La vida es un conjunto de modas, de eso no cabe duda. Vivimos en constante cambio, en continuo movimiento y movidos por las mareas que nos van llegando de un lado y de otro. No hay escapatoria. Inevitablemente estamos inmersos en un gran rebaño de extensión infinita, formando parte de una gran masa que se mueve al unísono.
Con las redes sociales éste fenómeno se ha multiplicado por 1,000,000. Cualquier chorrada se hace viral en cuestión de horas, minutos, segundos… El problema llega cuando se hacen virales cosas sustanciales capaces de dañar la salud o integridad de miles de personas, que sin conocimiento, se dejan llevar por todo lo que leen.